En el mundo
de hoy hay casas grandes pero familias pequeñas... más diplomas pero menos
sentido común... medicina avanzada, pero salud precaria. Viajamos y conocemos el mundo y sin embargo,
no conocemos a nuestros vecinos. Hay mucho rendimiento y menos paz
espiritual... mucho conocimiento pero menos sabiduría... muchos amigos
virtuales, y sin tiempo para los amigos reales... tenemos relojes caros pero
sin tiempo para nada.
Tenemos que volver a valorar lo que realmente importa, lo
que realmente tiene valor, lo que es realmente bello y hermoso. Tenemos que
tener tiempo de calidad con Dios,con nosotros mismos, con nuestra familia y con
los amigos porque la vida pasa, la vida es como un soplo, como una vela
encendida que un día se apaga. Nacemos sin traer nada y morimos sin llevar nada
y en medio del intervalo entre la vida y la muerte, peleamos por aquello que no
trajimos y que no nos llevaremos.
Vamos a pensar un poco en eso y vamos a
tratar de vivir más, amar más, perdonar y ser más felices. Vamos a aprender de
la naturaleza...los girasoles son plantas que buscan la luz del sol y en días
nublados, cuando no hay sol, se miran unos a otros buscando la energía qué hay
en cada uno de ellos, se miran unos a otros, erguidos, hermosos, sin bajar la
cabeza...y eso es lo que la naturaleza nos enseña, si no tenemos el sol todos
los días, nos tenemos los unos a otros. El poder del sol que sale cada mañana
existe dentro de nosotros y nunca es demasiado tarde para comenzar de nuevo.
Vinimos a este mundo a manifestar y a ser creadores.
Ahora es el momento de
enfocarnos nuevamente , enfocar nuestra voz interior y escuchar su llamando. No
hay nadie que se beneficie más que nosotros cuando decidimos abrir nuestro
corazón y permitir que nos guíe una vez más.
By: Dali |